El vehículo en el que viajaban se volcó y se incendió tras una falla en una llanta. Ambos fallecieron en el acto.

La vida puede cambiar en un instante. Lo que hace apenas una semana fue motivo de celebración y alegría, hoy se ha transformado en una tragedia irreparable para el fútbol mundial y para una familia que lo tenía todo para ser feliz. El delantero portugués Diogo Jota, figura del Liverpool y de la selección de Portugal, falleció junto a su hermano André Silva, también futbolista, en un brutal accidente de tránsito ocurrido en la madrugada de este miércoles 3 de julio en territorio español.

Jota, de 28 años, se había casado el pasado 22 de junio con su pareja de toda la vida, Rute Cardoso, en una ceremonia íntima en Oporto, donde estuvieron rodeados de sus tres hijos y sus seres más cercanos.

Las imágenes compartidas en redes sociales, mostraban a un hombre pleno, sonriente, abrazado a la mujer con la que decidió unir su vida con un “sí, para siempre”.

Pero la felicidad tuvo corta duración.

Según el informe de las autoridades españolas, el siniestro ocurrió en la autovía A-52, a la altura de Cernadilla, en la provincia de Zamora, cuando el Lamborghini en el que se movilizaban los hermanos sufrió la explosión de una llanta mientras realizaban una maniobra de adelantamiento. El vehículo perdió el control, volcó aparatosamente y terminó envuelto en llamas. Los servicios de emergencia confirmaron que ambos fallecieron en el acto.

La noticia ha generado un profundo impacto en la comunidad deportiva. El Liverpool FC, equipo en el que militaba desde 2020, expresó estar “devastado” y pidió respeto para el duelo de la familia. La Federación Portuguesa de Fútbol decretó luto, y referentes del deporte como Cristiano Ronaldo, Pepe y excompañeros del club inglés han manifestado su dolor por la inesperada pérdida.

Jota, cuyo nombre completo era Diogo José Teixeira da Silva, no solo era un talentoso futbolista con más de 180 partidos en la Premier League, sino también un referente humano dentro y fuera de la cancha. Había ganado la UEFA Nations League con Portugal, además de títulos con Liverpool, y era un apasionado del gaming, fundando incluso su propio equipo de eSports.

El accidente, además de cobrarse la vida del atacante, truncó también la carrera de su hermano André Silva, jugador del Penafiel de la segunda división lusa.

Hoy, mientras el fútbol llora la pérdida de uno de sus grandes talentos, la familia de Diogo intenta asimilar un golpe tan inesperado como devastador. De la felicidad de una boda soñada al duelo de una tragedia que enluta a Portugal y al mundo del deporte. La vida, una vez más, mostró su cara más cruel.