La mujer de 37 años, dio su vida en un acto de coraje al interponerse entre un sicario y su hijo menor de edad. El ataque, que ocurrió en el suroccidente de Barranquilla, estaría relacionado con disputas entre pandillas juveniles.

Una nueva noticia de madre que da su vida por su hijo se repitió en la ciudad de Barranquilla, donde Ana Milena Barón Martínez, de tan solo 37 años, murió como una heroína.

Señalan testigos, que la joven mamá se interpuso entre un sicario y su hijo menor de edad, para evitar que lo asesinaran.

Aunque con su humanidad logró salvar al adolescente, ella murió por la gravedad de las heridas.

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La trágica escena se registró sobre las 11:00 de la noche del pasado martes, en la diagonal 75 con carrera 13E, en el suroccidente de la ciudad. Dos hombres en moto llegaron hasta la vivienda de la víctima. Uno de ellos, quien iba como parrillero, descendió con una escopeta en mano y apuntó directamente al menor.

Sin dudarlo, Ana Milena se interpuso entre su hijo y el arma, tratando de evitar lo inevitable. El agresor disparó, y el proyectil impactó a la madre en el pecho. Aunque fue trasladada de inmediato al hospital del barrio La Manga, falleció por la gravedad de la herida.

El ataque no fue producto del azar. Según versiones de la Policía, el hijo de Ana Milena habría sido blanco del atentado por una disputa entre pandillas juveniles, que en los últimos meses han sembrado el terror en sectores del suroccidente barranquillero. Estas bandas han trazado líneas imaginarias de control territorial, y enfrentamientos entre jóvenes se han vuelto comunes. El presunto autor del disparo, de acuerdo con las primeras indagaciones, sería un joven de tan solo 19 años.

Vecinos y familiares describen a Ana Milena como una mujer dedicada a su hogar y protectora de sus hijos.