Su cuerpo fue trasladado a medicina legal en Santa Marta para lograr su identificación.

El descubrimiento de un cuerpo abandonado en una trocha de La Guajira revive el temor por los asesinatos violentos registrados en esta región, con características similares en casos anteriores.

En este caso, el corregimiento de Dibulla, en La Guajira, volvió a ser escenario de un hecho violento que alarma a sus habitantes.

Campesinos de la vereda Pénjamo encontraron un saco de café que contenía restos humanos, aparentemente pertenecientes a un hombre.

El cuerpo había sido torturado y abandonado a un costado de una trocha, envuelto en bolsas negras.

Este caso no es aislado en la región. En los últimos meses, se han registrado hallazgos similares en áreas rurales de La Guajira, donde cuerpos son encontrados en sacos o envueltos en materiales plásticos, un patrón que sugiere métodos recurrentes de ocultamiento y abandono por parte de los responsables. La mayoría de las víctimas han sido oriundas de Santa Marta y departamentos de Magdalena.

Estos eventos generan preocupación entre los habitantes y cuestionan la capacidad de las autoridades para frenar este tipo de crímenes.

La Policía Nacional, tras recibir el reporte a través de una llamada, desplegó a uniformados del Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria para acordonar la escena. Posteriormente, expertos del Laboratorio Móvil de Criminalística de la Sijín realizaron el levantamiento del cuerpo y lo trasladaron a Medicina Legal en Santa Marta para identificar a la víctima y establecer las causas de la muerte.

Este hallazgo se suma a una lista de casos sin resolver en la región, donde los cuerpos de las víctimas, frecuentemente en avanzado estado de descomposición, dificultan las investigaciones.

Líderes locales y comunidades cercanas han solicitado mayores esfuerzos por parte de las autoridades para esclarecer estos crímenes y garantizar la seguridad en las áreas rurales.

La trocha de Pénjamo, donde ocurrió el hallazgo, es conocida por su aislamiento, lo que ha facilitado su uso como lugar de abandono de cadáveres en otras ocasiones.

Todo parece indicar que estos homicidios corresponden a la disputa criminal entre autodefensas por el control del territorio.