Aunque sus familiares confiaban en que lograría sobrevivir, Jesús David Pereira no resistió las heridas causadas por un ataque a tiros. Tenía 22 años y un futuro por delante.

Jesús David Pereira luchó por su vida durante más de 24 horas, mientras su familia se aferraba a la esperanza de que saliera con vida de la clínica. Pero el pronóstico nunca fue alentador. Las balas habían hecho demasiado daño.

El joven barbero, de apenas 22 años, fue víctima de un atentado sicarial ocurrido en la mañana del lunes, en el barrio 17 de Diciembre en Santa Marta. Estaba sentado en una esquina del sector, compartiendo con conocidos, cuando fue sorprendido por hombres armados que llegaron en motocicleta. Dispararon sin decir palabra y huyeron de inmediato.

Pereira quedó tendido en el pavimento. Vecinos y familiares corrieron a auxiliarlo, logrando trasladarlo con vida a la clínica Gestión Salud. Allí, los médicos hicieron todo lo posible, pero las heridas eran profundas y múltiples. Su estado fue crítico desde el inicio.

Murió en la tarde de este martes 27, dejando tras de sí una familia devastada y muchas preguntas sin respuesta. Nadie entiende por qué lo atacaron, ni si era él el blanco del ataque. Como muchos otros jóvenes en Santa Marta, terminó siendo otra víctima más de una violencia que no da tregua.

La Policía Judicial (SIJIN) ya adelanta las investigaciones para esclarecer el caso y dar con los autores del crimen. Mientras tanto, la comunidad lamenta la pérdida de un joven trabajador, conocido por ganarse la vida con su máquina de cortar cabello y su esfuerzo diario.

Jesús David no alcanzó a cumplir sus sueños. Su historia se suma a la larga lista de víctimas que han caído en las calles de la ciudad, sin que aún haya claridad sobre los móviles que impulsan tanta sangre derramada.