La victoria del barranquillero en el reality del Canal RCN provocó caravanas, celebraciones espontáneas y fiestas en discotecas de varias ciudades del Caribe. En Barranquilla, la multitud se volcó a las calles como si se tratara de un triunfo del Junior.

La noche del lunes fue todo menos tranquila en la región Caribe. Apenas se anunció que Andrés Altafulla era el ganador de “La Casa de los Famosos Colombia”, el ambiente cambió por completo. Las redes sociales estallaron y, en cuestión de minutos, las calles de ciudades como Barranquilla, Santa Marta, Cartagena y varios municipios del interior del país se llenaron de caravanas y celebraciones improvisadas.

En Barranquilla, la algarabía fue tan intensa que muchos compararon el ambiente con el de una consagración del Junior, a pesar de que el equipo rojiblanco fue recientemente eliminado. Con camisetas a rayas, banderas y cornetas, cientos de motociclistas salieron en caravana, recorriendo las principales avenidas sin importar la hora. No celebraban un gol ni un campeonato, sino el triunfo de un barranquillero en uno de los realities más vistos del país.

El fenómeno no fue exclusivo del Atlántico. En Santa Marta, decenas de vehículos hicieron sonar sus bocinas en señal de apoyo, mientras en discotecas se organizaron fiestas temáticas en honor al nuevo ganador. Altafulla se llevó no solo el cariño del público, sino también un premio de 400 millones de pesos.

La celebración fue la muestra del impacto que puede tener la televisión en la vida cotidiana. Por unas horas, la región se unió en torno a una figura que representó su identidad en un escenario nacional, y que terminó por convertirse en el nuevo ídolo del Caribe.