La madre resultó gravemente herida con quemaduras de consideración tras lanzarse entre las llamas para rescatar a sus cuatro hijos, quienes también sufrieron lesiones. La tragedia ocurrió en una vivienda alquilada del barrio El Bosque, en Barranquilla. La comunidad pide apoyo urgente para la familia que lo perdió todo.

El barrio El Bosque de Barranquilla fue escenario de una tragedia que dejó en evidencia el instinto más poderoso de una madre: proteger la vida de sus hijos a cualquier costo.

Una vivienda fue consumida por las llamas luego de que, según testigos, dos de los menores —de cinco y cuatro años— jugaran con una mechera y provocaran accidentalmente el incendio.

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Dentro de la casa se encontraban cuatro niños, de entre dos meses y siete años. La madre, al percatarse del fuego, no dudó en enfrentarlo. Con quemaduras de consideración, logró sacar a sus hijos uno por uno, exponiéndose al humo y al calor extremo. Hoy permanece en estado delicado, bajo pronóstico reservado, mientras sus vecinos la llaman “una madre valiente, una verdadera guerrera”.

Los menores fueron trasladados a un centro médico. Presentan lesiones leves y afectaciones por la inhalación de humo. El mayor de ellos sufrió quemaduras menores. A pesar de que todos sobrevivieron, la familia perdió todas sus pertenencias, pues la casa que habitaban en arriendo quedó completamente destruida.

Vecinos como Lina Agámez, quien ayudó durante la emergencia, aún no salen del asombro. “Ella no pensó en ella, solo en salvarlos. Eso no lo hace cualquiera”, dijo, conmovida. La comunidad del sector se ha unido para recolectar ayudas materiales y económicas para apoyar a esta familia, que hoy enfrenta una nueva batalla: levantarse de las cenizas, con vida, pero sin nada.